29 diciembre 2008

Fin de Año

Para finalizar el año, cuelgo la entrevista que nunca se publicó de Remate. Una manera como cualquier otra de dar una etapa por zanjada.

Buscando el archivo, he visto que es del ocho de octubre, por lo que el documento se antoja ya bastante anticuado. Habría que aclarar una serie de puntos, como cuando sale en la conversación el tema del mimo de la fnac, asunto relativo a la promoción del disco en su primera semana en la calle.

En fin, que allá va.

REMATE: "Yo la vida me la invento"

Han pasado sólo cinco años desde ese sorprendente Deconstructing Mood, un trabajo que reveló a un artista absolutamente diferente a todo lo que se cocía en el panorama independiente nacional. Un lustro en el que la sideral evolución de su música no ha hecho perder un ápice de coherencia a Fernando Martínez, alias Remate.

¿Cómo valoras tu trayectoria desde aquí, desde el momento presente, sobre todo recordando esos momentos en los que hablar de tus canciones podía causarte hasta pudor?

Bueno, el primer disco fue muy, muy inconsciente, mientras que al segundo, cuando lo reviso, ya le veo más sentido, lo encuentro bastante inspirado. Después he vivido una inmersión absoluta en hacer canciones y vivir dentro de ellas, y ese hecho ha ido devorándome poco a poco y ocupando la mayor parte de mi vida.

Creo que he ido sacando discos muy rápido, saltándome pasos intermedios; los hubo entre el segundo y el tercero, entre el tercero y el cuarto...

¿Tú crees que es así? A mí me parece que ha habido saltos estéticos, pero ninguno como el de ahora.

Hombre, el paso más significativo es éste, donde he tratado de dar con algo más genuino, menos clasificable.

Metido en la vorágine, veía diferencias entre los cuatro anteriores, pero está claro que No Land Recordings recoge de la mejor manera posible el espíritu, la inspiración y mi manera de hacer canciones hasta entonces, grabada de la mejor manera, con banda a veces, sin banda otras, analógico hasta donde pudimos... Está claro que esto, definitivamente, es otra cosa.

Pero, cuando acabaste No Land Recordings, o en cualquier otro momento, ¿veías estas canciones en el horizonte?

¡Sí, sí! Casi te diré que este Safe and sound es más de mi memoria musical de niño, de adolescente. Va mucho más allá. Yo estaba apegado a una manera de hacer canciones más súbita, más vehemente y guardaba el impulso de acercarme a algo más genuino, más natural en mí, algo que abarca más estados de ánimo.

Los otros discos eran implosivos, de habitación cerrada, vida interior, con un carácter más críptico, y aunque No Land Recordings ya abría algunas ventanas, es Safe and sound el que se retrotrae mucho más a esa etapa de mi vida en la que eran especialmente importantes Fleetwood Mac, De La Soul, Beatles, Randy Newman, Bee Gees, Simon y Garfunkel, un collage de cosas que me gustan y que sospecho que determinan en él algo más personal y genuino que lo que venía haciendo.

Lo más lúcido que he leído sobre tu disco es sobre las similitudes con Bowie, pero por otro lado dices que es un disco mucho más personal. La canción que abre el disco posee, sin embargo, las mejores cualidades de un songwriter. ¿Te ha costado más trabajo hacer una canción perfecta que desarrollar otro tipo de música más experimental? ¿Cómo casas el intimismo con el hecho de que pueda llegar a más gente?

Es que no es contradictorio que sea personal o genuino con que sea más accesible a un tipo más abierto de público. A mí me vienen canciones de las que llamamos redondas, pero también experimentales y, sencillamente, lo que ocurre es que ahora me he visto capaz de hacer un disco como este, gracias al oficio adquirido, soltándome como intérprete.

Me podía haber apetecido en otro momento, pero ahora me fluía. Siempre me ha parecido interesante que haya una cierta sensación de trascendencia en mi música, de lo contrario he abandonado lo que tuviera entre manos y esperado que llegara ese momento especial. Honradamente, tampoco sé si es más accesible.

Me llama la atención la ruptura entre el primer tema (An eye in the forehead) y el segundo (Rise and shine), el contraste. Uno parece que mira hacia delante, y el otro hacia los anteriores discos.

¡No estoy nada de acuerdo! La segunda no puede recordar a ningún disco anterior mío. Es un poco hip-hop, rapeamos, tiene esa cadencia incluso con la batería… No sé si el que escucha el disco puede tener una percepción opuesta, pero…

En ese caso no tengo nada que decir, pero bueno… también me resulta más desnuda, más gutural, y por eso me conducía hacia los otros discos, vaya…

De todos modos, el orden de las canciones no responde a términos de accesibilidad, de intimidad, sino a un ritmo narrativo. En este disco, más que nunca hay presentación, nudo, desenlace y coda.

Lo que no me negarás es que es un disco más compacto. No se da esa diferencia de antaño entre canciones más rotundas, como Dinosaurs, y más experimentales, como Glowing colours.

Sí, sí, claramente… En No Land Recordings hay canciones entrelazadas entre sí, de una manera o de otra y muchísimos elementos propios de una obra larga. Safe and sound es un disco de pop, condensado como una píldora de astronauta.

Te quería preguntar por tus cambios de sello. Cambios que chocan porque parecía que éstos se adaptaban perfectamente a tu estilo, especialmente Acuarela.

Las cosas desde fuera no se ven igual. El reducido tamaño de la escena independiente hace que se creen lazos que, en ocasiones, no permiten un juicio fidedigno de la manera de trabajar de esta o aquella casa. No es nada malo, por otra parte. Se trata de compartir ideas en un determinado momento y de las condiciones dadas por el sello. Estoy orgulloso de haber pertenecido tanto a Limbo Starr como a Acuarela, pero ahora esas ideas y esas condiciones las ofrecía Mushroom.

¿Distribución?

No me gustaría dejar una impresión negativa de mis anteriores sellos, porque no es eso. Sencillamente, las oportunidades que se presentan contaban, por parte de Mushroom, con un respaldo más ajustado a lo que yo consideraba necesario.

¿Crees que se consolidará el respaldo que tuvo No Land Recordings en el Reino Unido?

Con llegar allí, dar una serie de conciertos y que me hagan sólo un poco más de caso que la otra vez, que tampoco lo esperaba, me doy por satisfecho. Eso sí es un objetivo claro, y todo indica que puede cumplirse. Otros aspectos a nivel de mercado sé que son muy complicados.

Lo cierto es que Mushroom te está apoyando muchísimo. ¿Sientes algo de presión?

No, al contrario. Siento confianza. No niego que produzca cierto vértigo generar expectativas, pero lo que están haciendo conmigo lo interpreto como un estímulo, como una suerte.

También ha cambiado la imagen de seriedad y austeridad que transmitías. ¿Te molesta un poco que se empiece a hablar del personaje "Remate", por encima de la música?

Lo primero que quiero aclarar es que el famoso mimo de la fnac no soy yo. Por otro lado, lo que se pueda decir no me preocupa nada. El indie español tiene esa tendencia a mirar fijamente los ácaros de la moqueta cuando toca. Hasta el momento, mi música ha sido muy introspectiva, y ahora que se ha ido abriendo poco a poco es normal que la imagen cambie. De todos modos, hace tiempo que me visto como aparezco en las fotos.

Además, yo es que considero necesario crear un personaje, tener claro cuál es el perfil del protagonista de la obra… No es un personaje impostado, pero sí puede haber algo de ello porque en el ífondo la vida te la inventas –porque yo la vida me la invento. El entorno no debe condicionarte a la hora de elegir.

Volviendo a la música, teniendo este disco un perfil más definido, ¿se mantendrán esos directos con tanta improvisación y sin ningún rescate de trabajos anteriores?

Más que improvisación, diría que es mantener viva la canción. No concibo el directo si no es en relación con el álbum “vigente” en ese momento, pero eso sí, una relación con un recorrido no absolutamente lineal. Sí imagino que alguna recuperaremos de No Land Recordings.

¿Han surgido más colaboraciones aparte de la de Marina Gallardo?

Ahora no era el momento, aunque ha habido sugerencias. Lo que tenemos en el cajón es la colaboración con Muni Camón [ex Maddening Flames] que me ilusiona mucho.

¿Cómo te ves dentro de otros cinco años, teniendo en cuenta los cambios de este último lustro?

Para mí, el camino abierto por Safe and Sound es bastante estimulante, pero puede bifurcarse de mil maneras. Me divierte jugar con las canciones, que son la base de todo, y luego ya veremos… fantaseo con la idea del crooner, pero como juego, porque es evidente que no respondo a esa etiqueta. También me gustaría que toda la gente que me sirve de apoyo y me enriquece siguiera ahí, para seguir diciéndome lo bueno y lo no tan bueno, tal como han hecho hasta ahora.

4 Comments:

Anonymous Anónimo said...

No se, pero algunas canciones me recuerdan mucho a Destroyer, del que soy fan. La voz, aunque no sea tan nasal y su forma de cantar se parece bastante.

Me encanta!

31 diciembre, 2008 19:25  
Anonymous Anónimo said...

Me has movido la isla, como en Perdidos!!!

Cuando iba a comentar en la entrada posterior a esta me encuentro con que ya no está...

Feliz año 2009!!!

31 diciembre, 2008 19:55  
Blogger diego-j.c. said...

un gran tipo Remate (y en directo, en mi opinión, mucho más disfrutable en acústico...; tocó, a petición del público, una versión excelsa del "Mr. Tambourine Man").
saludos y feliz '09!

31 diciembre, 2008 20:21  
Blogger Isaac said...

Iván, no sé qué cable pisé, pero el post de lo mejor de 2008 había desaparecido, joder... Ya lo he vuelto a subir... con algunos añadidos que se me habían pasao... Trampa...
Diego, a mí también me gusta mucho en directo, pero me gustaría que fuera un poco, sólo un poco, más concesivo, no te voy a engañar.

01 enero, 2009 14:50  

Publicar un comentario

<< Home